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Qué es una lengua materna o primera lengua L1

Lengua Materna (L1): El Primer Vínculo con el Lenguaje y la Cultura

La lengua materna, conocida también como primera lengua (L1), es un concepto fundamental en el desarrollo lingüístico y cultural de cada individuo. Se refiere a la lengua que una niña o un niño adquiere y aprende en los primeros años de vida como parte de su proceso de socialización en su entorno social más cercano, principalmente en el seno familiar. Este idioma es el primer puente que conecta a una persona con su cultura, su familia y su comunidad.

Una característica notable de la lengua materna es su temprana adquisición. Durante los primeros años de vida, los niños son especialmente receptivos al lenguaje que les rodea. Desde el momento en que un bebé comienza a balbucear sus primeras palabras, la lengua materna se convierte en una parte esencial de su identidad y comunicación.

Es importante destacar que una persona puede tener una o más lenguas maternas. Este concepto es especialmente relevante en contextos de gran diversidad lingüística, como en algunas zonas aimaras de Puno. Allí, es común que los niños adquieran y aprendan simultáneamente más de una lengua materna. Por ejemplo, algunos niños pueden considerar el aimara, el castellano y el quechua como sus lenguas maternas debido a la exposición temprana y constante a estas lenguas en su entorno familiar y comunitario.

La lengua materna no es solo un medio de comunicación, sino también un vínculo vital con la cultura y la historia de una comunidad. A través de esta lengua, se transmiten historias, valores, tradiciones y formas de vida que se han preservado a lo largo de generaciones. La lengua materna es la herramienta a través de la cual las personas entienden su entorno, se relacionan con su familia y comunidad, y se expresan en su forma más auténtica.

En el contexto de la Educación Intercultural Bilingüe (EIB), la lengua materna desempeña un papel crucial. La EIB reconoce la importancia de construir una base sólida en la lengua materna antes de introducir una segunda lengua, generalmente el castellano. Esto permite a los estudiantes desarrollar sus habilidades lingüísticas y cognitivas en un entorno que respeta y valora su identidad cultural.

En resumen, la lengua materna, o L1, es el primer y más íntimo vínculo que una persona establece con el lenguaje y la cultura. Es la herramienta a través de la cual se comprende el mundo, se forja la identidad y se conecta con la comunidad. La lengua materna no solo es una forma de comunicación, sino un tesoro cultural que merece ser preservado y celebrado. La Educación Intercultural Bilingüe reconoce esta importancia y trabaja para fortalecer el vínculo entre los estudiantes y sus lenguas maternas en un entorno educativo enriquecedor.

Créditos: Tu docente EIB